Según wiki, El maracuyá, mburucuyá, parcha o parchita (Passiflora edulis) es una planta trepadora del género Passiflora, nativa de las regiones cálidas de América. Fue descubierta en el Perú en 1569, por un médico español de apellido Monardes, quien escribió y documentó sobre el uso que daban los indígenas al fruto y a la planta, propagando así este conocimiento al viejo mundo. Se cultiva comercialmente en la mayoría de las áreas tropicales y subtropicales de la tierra, entre otros países: El valle de Azapa en Chile, Paraguay, República Dominicana (Chinola), México, Argentina,Uruguay, Bolivia, Brasil, Ecuador, Perú, Colombia, Venezuela, Costa Rica, Nicaragua, Panamá, partes del Caribe y Estados Unidos. Esta especie es sumamente apreciada por su fruto y en menor medida por sus flores, siendo cultivada en ocasiones como ornamental. La infusión de sus hojasy flores se utiliza, además, con efectos medicinales. La flor del Maracuyá (usar preferentemente el término mburucuyá) es la flor nacional del Paraguay.
(Foto: R.Pimentel)
Pero, yo siento a este fruto tan nuestro, tan de mi gusto. ¡Me encanta!, desde pequeña siempre me gustó tomar jugos, helados y marcianos de Maracuyá. Ni de embarazada perdí mi gusto por este cultivo, al contrario, se reforzó más. Un anécdota muy presente que tengo y siempre recuerdo: a días de dar a luz me había comprado cinco marcianos de esta fruta, durante la tarde me había comido cuatro, sobraba uno, quise llevarlo a mi casa, cuando de repente, mi madre dijo: no sigas comiendo tanto hielo, pobre bebé, nacerá mal. Yo me asusté, me puse triste y a llorar. Mi papá al verme así, le dio la contra a mi mamá: Pero, está embarazada, ¡déjala, es su antojo!. Mi mamá no dijo más. Yo me llevé el marciano y, como una niñita, me lo comí con gusto. Estaba tan feliz, parecía una nena ¡de verdad!. Hoy, después de cuatro años, siendo las 04:08 am, y a cuatro días de celebrar el cumpleaños de mi pequeño, estoy frente a la computadora comiendo el cuarto marciano de maracuyá. Definitivamente, esta fruta me gusta y me seguirá gustando hasta el fin de mis días. Amo el verano (así sudemos como chanchos), amo la playa (aunque no vaya tan seguido por falta de tiempo y la chamba), amo la maracuyá. Y me gustan las rosas blancas =)
No hay comentarios:
Publicar un comentario